martes, 17 de abril de 2018

Segunda República de Panamá

Miguel Ángel Montiel Guevara

Este artículo es una propuesta didáctica a nuestros colegas educadores, consistente en incorporar en la enseñanza de la historia nacional el concepto de Segunda República de Panamá.

Emular en ese sentido a Francia y España, que demarcan períodos históricos trascendentales, distinguiéndolos y separándolos por medio de varias repúblicas disímbolas. En el caso de Francia son cinco repúblicas de las que da cuenta su historia nacional. En el de España, dos. No es el caso ahondar aquí sobre ellas.

El concepto Segunda República de Panamá aparece por primera vez en mi libro Ricaurte Soler. La cuestión de Identidad Nacional y Latinoamérica.

Allí cito al maestro: “La formación nacional panameña alcanza un nuevo hito en 1903 al crearse la república mediatizada… la independencia, aún mediatizada, significó un avance”. Totalmente de acuerdo. Subrayo mediatizada. Lo que lleva a preguntar: ¿La república que nació el 3 de noviembre de 1903 es la misma de hoy? No, definitivamente no. Obligante es la siguiente pregunta: ¿Por qué? Por lo que todos conocemos: en 1903 la república (la primera) nació atrofiada, mediatizada como bien dice Ricaurte Soler; con un tumor llamado Zona del Canal que hubo que extirpar por medio de una larga lucha de casi 100 años que el general Omar Torrijos Herrera llamó alpinismo generacional.

El 31 de diciembre de 1999 Panamá recuperó su soberanía total, consigna por la que combatieron miles de panameños, estudiantes del Instituto Nacional, mi alma máter; del Artes y Oficios, del José Dolores Moscote, del Abel Bravo, de la FEP, del Partido del Pueblo, de la Universidad de Panamá, y que a mi generación tocó hacer realidad finalmente. Pido disculpas a los que no menciono. Este espacio no lo permite. Trabajo en un libro al respecto.

Aquel día 31 de diciembre de 1999 nació la Segunda República de Panamá; nueva, con un solo territorio bajo una sola bandera y plena jurisdicción sobre toda la geografía nacional.

Debe enseñarse así a nuestros jóvenes estudiantes de primaria, premedia y media, con el fin de consolidar y fortalecer la conciencia histórica nacional.

En ello radica la esencia de la propuesta didáctica que hacemos. Así sea.

La Prensa, 17 abr 2018